tu sangre.

Parece que fué ayer que te pedí que te alejaras, que te fueras lo más lejos, que intentaras escaparte, aunque fuera por unos simples minutos de la realidad.
Está bien si todavía me quieres, pensé. Pero es que me he equivocado tantas veces que no las puedo contar y es imposible pensar en que yo pudiera lograr hacer feliz a alguien y estar con alguien como yo no es lo que te mereces, no es lo que yo quiero que tengas.
Porque para que tenerte a mi lado si sé que esto no está bien?
Para qué hacerte la vida imposible y al mismo tiempo crearme un propio infierno al ver lo que te causo?
Y es que si pudiera, te daría mi vida pero parece que ni eso es suficiente para compensar todo lo que has pasado, no es que no te quiera.
Es que te amo tanto que prefiero que seas feliz con cualquier persona que no sea yo, por que mírame, jamás he hecho algo bueno, nunca logro concretar las cosas y no sé lo que quiero hacer de mi vida. Sólo sé que quiero que seas feliz.
Tal vez... Si tan sólo pudiera empezar todo de nuevo, amor, te lo digo, si pudiera ser como si nunca nos hubiéramos conocido, sería tan fácil para tí.
Me acostumbraría a verte sonreír, a verte ser feliz mientras yo me quedo, mientras me escondo entre las sombras de lo que fué y no debió ser y me mantengo entre la maldita penumbra que rodea mi desgracia por ver que te tuve, pero jamás te ví sonreír.


*Me pregunto de que sector de mi subconsciente sale esto. Es curioso.