miércoles, 21 de abril de 2010

Quereme así, piantao.

Mira a ambos lados que no venga nadie, ni nada.

Luego con cuidado de no pasar a llevar nada que haga ruido, se recuesta en la mitad de la calle, en el cemento, con su bonito vestido color turquesa que nadie nunca vió, y resaltan nuevamente sus sueños, esos sueños que estan encerrados en sus párpados, porque tiene otras personas de quienes preocuparse antes de ella. Su vestido es corto, corto y tan pomposo, tan extravagante que bien podía ser un disfraz.

Sus manos tiemblan, tiemblan al compás del titubeo de su mente, mientras tararea un viejo tango de Piazzola, luego intenta incorporarse de nuevo, ponerse de pie, guardar su vestido turquesa y ser de nuevo la persona gris que todos los demás son. El tango sigue ocupando gran parte de su mente, gran parte de su corazón y gran parte de lo que es su vida, mientras un argentino algo polaco la inunda con su voz y la invita a ponerse de pie.

-
Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...
No ves que va la luna rodando por Callao;
Que un corso de astronautas y niños, con un vals,
Me baila alrededor... ¡Bailá!, ¡Vení!, ¡Volá!
-
Y entonces ella se pone de pie, lento, sin prisa, ya que un segundo gastado de vida no significa nada en este momento. Comienza a dar pasos algo débiles, siempre acompañada del lindo movimiento de su vestido turquesa, que se adaptaba a su ritmo como el viento a su piel. Cada paso, cada nota, cada frase sin sentido que había, y que después de todo... Cuanto sentido tenían!, la ayudaban a volar, a elevarse por sobre si misma dejando correr sus emociones, expresando como sus brazos lograban tocar las estrellas y como sus pies se despegaban del cielo, y entonces era ella, en verdad ella, con su vestido turquesa que eran sus sueños, sus amores y ese miedo que tenía de ser ella, de mostrar quién era.
-
Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...
Yo miro a Buenos Aires del nido de un gorrión;
Y a vos te ví tan triste... ¡Vení!, ¡Volá!, ¡Sentí!
El loco berretín que tengo para vos.
-
Y así entre pasos, attitudes, plies y cuantas cosas más, era ella de nuevo, ella al natural, sin esconder sus emociones. Sin esconder su alma, dejando todo atrás, para empezar de nuevo, con su juventud intacta del miedo de morir, y su sonrisa cansada de nunca sobresalir, empezar de nuevo, un paso atrás, pero dos adelante, así, sin más.
*
Explicación pertinente a los hechos: Escucho tango desde que era pequeña, sonara tonto, pero creo que es mi forma de inspirarme para escribir, para sentir, y para todas las cosas que mencioné. Que estoy loca, si, lo sé, pero a la vez con mis frases locas puedo demostrar mas cordura que varios. Finalmente, como diría Adriana Varela, Gracias Polaco (Astor Piazzola) por dejarnos soñar con vos! Loco él y loca yo.

0 comentarios:

 

Blog Template by YummyLolly.com - RSS icons by ComingUpForAir