Ya subí esto que voy a escribir a Tumblr, pero creo que me sorprende lo poco egoísta que he sido con este niño castorcito puercoespín que sale aquí al lado mío.
Es que cuando nació, lo primero que yo hice fué apretarle la nariz a ver si se ahogaba y el me tiró el pelo.
Sí, así comenzó nuestra relación de hermandad.
Yo hubiera querido que fuera cheerleader, junto conmigo y que fueramos de lo más chismosos y patudos.
Digo, que fueramos super buenos y enamorados de ese deporte.
Pero resulta que el pequeñín decidió que podía hacer cualquier deporte que el quisiera, excepto ballet (considerando que es atletismo), cheerleading (es como gimnasia artística, casteller y parkour al mismo tiempo) y obviamente, las gimnasias artísticas.
Es que, digamos que yo pongo la parte linda del deporte y el pone la parte del sudor y así nos vamos.
Pero en fín, el punto es que a pesar de todo, nos complementamos menos que cualquier par de hermanos, pero aún así tenemos nuestras estupideces juntos, que solo nosotros entendemos y es eso lo que nos hace vernos tan bonitos en todas las fotos.
Y es por todo lo anteriormente dicho que te extraño Estrudis. Te fuiste hace como media hora pero te empecé a extrañar cuando te subiste al auto.
Igual eres la princesa de maipú y yo soy el leon sandunguero :D
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